El colágeno fortalece la piel, nuestro órgano más grande y primera línea de defensa, apoyando la dermis desde adentro, mejorando la estructura, la firmeza y la hidratación de la piel para una tez que irradia vitalidad.

El colágeno favorece la salud de los folículos pilosos y proporciona aminoácidos esenciales para la producción de queratina. También ayuda a fortalecer las uñas, reforzando el lecho ungueal y apoyando la estructura del nuevo crecimiento.

El ejercicio favorece la síntesis de colágeno, pero con el tiempo puede sobrecargar las articulaciones. El colágeno, en particular el tipo II, ayuda a mantener la salud del cartílago, favoreciendo la flexibilidad, la movilidad y la recuperación articular, a la vez que promueve la función articular general.

Los huesos son tejidos vivos compuestos principalmente de colágeno tipo I, que proporciona fuerza y flexibilidad. La suplementación con colágeno, combinada con vitaminas y minerales clave, favorece la densidad ósea, la estructura y la salud general.

Una dosis de 10 g de Colágeno Verdadero aporta 9 g de proteína. Si bien no es una proteína completa, el colágeno desempeña un papel fundamental en el rendimiento muscular, fortaleciendo el tejido conectivo, facilitando la recuperación y reduciendo el riesgo de lesiones, sentando las bases para mejores entrenamientos y músculos más fuertes.

Los aminoácidos del colágeno, particularmente la prolina y la glicina, favorecen la salud intestinal ayudando a reparar el revestimiento intestinal, promover un entorno intestinal saludable y mejorar la absorción de nutrientes, lo que puede mejorar la digestión y el bienestar general.